Que no nos pidan calma ni silencio…
Cuando un prefecto que ya había sido denunciado por violencia de género mata con su arma reglamentaria a su ex pareja y viaja veinte minutos para matar a la otra ex pareja.
Cuando una mujer trans, trabajadora sexual, es salvajemente asesinada, desechada como basura, la prensa hegemónica no reconoce su identidad y casi nadie se manifiesta.
Nuestro dolor y nuestra rabia ya no tienen paciencia y no vamos a tolerar:
Que un juez pida la recusación de una fiscal porque ella acompaña las movilizaciones de Ni una menos y muestra así hasta qué punto llamamos justicia a una institución misógina.
Que el gobernador de Jujuy diga: “no voy a liberar a esa mujer”, mostrando la justicia como mascarada de su violencia.
Que el intendente de Mar del Plata diga que Ni una menos es una moda en la que se gasta dinero mientras en la ciudad que gobierna crecen los femicidios y violaciones.
Que el nuevo juez que se nombró en la Corte Suprema de Mendoza sea un machista reconocido y que la homofobia que profesa nos insulte desde sus fallos.
Nosotras marchamos en Mendoza, nosotras reclamamos por Jujuy, gritamos en todo el país por el travesticidio en Misiones, nos organizamos en Entre Ríos, en Mar del Plata, en Buenos Aires y en todas partes.
¡Nosotras estamos alertas y organizadas!
Porque los que hablan arrojando esas frases, llevando esos expedientes, relativizando los hechos, son parte de una trama patriarcal que el femicida se toma muy en serio y lleva al extremo, la vuelve sangre y cuerpo. Que no nos pidan que creamos que es objetividad olvidar la perspectiva de género ni que barnicen actos judiciales arbitrarios con listas de currículums. Porque esos jueces y esos intendentes y esos funcionarios serán responsables de políticas públicas o de su inexistencia.
Cómo se atreven a decir, mientras secuestran y violan muchachas, que Ni una menos es una cuestión de moda o una mirada parcial. ¡Nosotras nos organizamos en América Latina!
Cómo se atreven a negarnos la decisión sobre nuestros cuerpos negándonos el acceso a los abortos que ya son legales en Argentina.¡Nosotras acusamos por cada muerte por aborto clandestino! ¡Basta!
Ni una menos es una necesidad, una exigencia, un llamado a conjugar esfuerzos contra las violencias y contra la falta de autonomía para nuestros cuerpos y nuestras vidas. Es una denuncia contra los que con sus palabras y sus roles institucionales, su silencio y su presunta neutralidad, son cómplices de los travesticidas y femicidas.
Nosotras queremos que nuestro grito haga temblar la tierra, pero también macerar ese grito en organización, reunirnos en asambleas, afilar nuestras lenguas, conversar lo que vendrá, inventar un mundo para todxs.
#NosotrasNosOrganizamos
Nosotras nos seguimos organizando para afirmar: Ni una menos. Vivas nos queremos.